domingo, 11 de mayo de 2014

VICTORIA: LOS LIBROS DE TEXTO NO CAMBIARÁN

El pasado 28 de abril, el Consejero de Educación de la Junta de Castilla y León, Juan José Mateos, anunció que el próximo curso 2014-2015 no van a cambiarse los libros de texto, es decir, que van a servir los mismos de este curso. Las adaptaciones que sean necesarias en los cursos que comienzan con la aplicación de la Lomce (1º, 3º y 5º de Primaria) se harán mediante materiales que elaborará la propia Consejería y pondrá a disposición de los docentes en plataformas digitales. El texto de la nota de prensa difundida por la Consejería de Educación, en la parte atinente a los libros de texto, es la siguiente:
Con respecto a los libros de texto, Mateos ha insistido en su apuesta por mantener los actuales. Para ello, desde la Consejería se elaborarán materiales específicos de apoyo al profesorado que estarán disponibles en una plataforma digital. De esta manera, el titular de Educación ha asegurado que los docentes tendrán a su disposición unidades didácticas de los nuevos contenidos, de manera que puedan impartir las clases sin necesidad de que las familias adquieran libros de texto diferentes a los actuales. En este sentido, desde la Administración educativa autonómica se promocionarán los sistemas de préstamo y reutilización de los libros de texto, se dará continuidad y mejorará el Programa RELEO -en la actualidad se desarrolla en 278 centros de la Comunidad- y se convocarán las ayudas a los libros de texto dirigidas a las familias.
La nota de prensa entera se puede leer en este enlace.
Esto es precisamente lo que entendía Fapa-Burgos que se debía hacer, para evitar gastos a las familias y no dejar sin sentido los bancos de libros y la propia Resolución de la Junta que preveía la duración de los libros hasta el curso 2.015-2.016. Estamos muy satisfechos, y creemos que es legítimo pensar que, con la presión ejercida a través de la consulta efectuada por nuestras Ampas, hemos contribuido a que se adoptara esta decisión.
Nos gustaría que esta decisión de la Junta fuera el primer paso para llegar al sistema que desde siempre preconiza Fapa-Burgos, junto con el resto de organizaciones de madres y padres de la escuela pública: que los libros y materiales educativos sean propiedad de los Centros educativos, y se presten a las familias, sin que éstas tengan que efectuar desembolso alguno. La implantación progresiva de la Lomce puede ser una excelente oportunidad para ello. Así se lo hemos pedido a la Consejería en el escrito que le hemos presentado.

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